lunes, 8 de agosto de 2016

Adolf Hitler

Hijo de un aduanero austriaco, su infancia transcurrió en Linz y su juventud en Viena. La formación de Adolf Hitler fue escasa y autodidacta, pues apenas recibió educación. En Viena (1907-13) fracasó en su vocación de pintor, malvivió como vagabundo y vio crecer sus prejuicios racistas ante el espectáculo de una ciudad cosmopolita, cuya vitalidad intelectual y multicultural le era por completo incomprensible. De esa época data su conversión al nacionalismo germánico y al antisemitismo.
En 1913 Adolf Hitler huyó del Imperio Austro-Húngaro para no prestar servicio militar; se refugió en Múnich y se enroló en el ejército alemán durante la Primera Guerra Mundial (1914-18). La derrota le hizo pasar a la política, enarbolando un ideario de reacción nacionalista, marcado por el rechazo al nuevo régimen democrático de la República de Weimar, a cuyos políticos acusaba de haber traicionado a Alemania aceptando las humillantes condiciones de paz del Tratado de Versalles (1919).

Hitler hacia 1933
De vuelta a Múnich, Hitler ingresó en un pequeño partido ultraderechista, del que pronto se convertiría en dirigente principal, rebautizándolo como Partido Nacionalsocialista de los Trabajadores Alemanes (NSDAP). Dicho partido se declaraba nacionalista, antisemita, anticomunista, antiliberal, antidemócrata, antipacifista y anticapitalista, aunque este último componente revolucionario de carácter social quedaría pronto en el olvido; tal abigarrado conglomerado ideológico, fundamentalmente negativo, se alimentaba de los temores de las clases medias alemanas ante las incertidumbres del mundo moderno. Influido por el fascismo de Mussolini, este movimiento, adverso tanto a lo existente como a toda tendencia de progreso, representaba la respuesta reaccionaria a la crisis del Estado liberal que la guerra había acelerado.
Sin embargo, Hitler tardaría en hacer oír su propaganda. En 1923 fracasó en un primer intento de tomar el poder desde Múnich, apoyándose en las milicias armadas de Ludendorff («Putsch de la Cervecería»). Fue detenido, juzgado y encarcelado, aunque tan sólo pasó en la cárcel nueve meses, tiempo que aprovechó para plasmar sus ideas políticas extremistas en un libro que tituló Mi lucha y que diseñaba las grandes líneas de su actuación posterior.
A partir de 1925, ya puesto en libertad, Hitler reconstituyó el Partido Nacionalsocialista expulsando a los posibles rivales y se rodeó de un grupo de colaboradores fieles como Goering, Himmler y Goebbels. La profunda crisis económica desatada desde 1929 y las dificultades políticas de la República de Weimar le proporcionaron una audiencia creciente entre las legiones de parados y descontentos dispuestos a escuchar su propaganda demagógica, envuelta en una parafernalia de desfiles, banderas, himnos y uniformes.

Bomba de Hiroshima


A las 2:45 de la madrugada del 6 de agosto, el avión B-29 llamado “Enola Gay” despego de Tinian. La bomba fue montada encima del avión para evitar un accidente nuclear al despegar. Acompañando al Enola Gay iba un avión fotográfico y otro instrumental. . A las 08:15 del 6 de agosto de 1945, el Enola Gay lanzó sobre Hiroshima a “little boy”, nombre en clave de la bomba de uranio.
La bomba atómica fue preparada para detonar a 560 metros de altura sobre la ciudad.
En pocos minutos, una columna de humo y fuego, de color gris-morado, surgió en la tierra, a una temperatura aproximada de 4000º C, lo que calcinó a miles de personas en el centro de Hiroshima.
Todos los edificios en el radio de 13km cuadrados desde el centro de la explosión quedaron totalmente destruidos. Unas 78.000 personas, y quizás muchas miles mas, murieron o fueron gravemente heridas en Hiroshima.
Tokio, a unos 700 kilómetros de distancia, perdió todo contacto con Hiroshima.
El gobierno japonés envió una misión de reconocimiento para informar sobre lo que había pasado, pero de Hiroshima sólo quedaba una enorme cicatriz en la tierra, rodeada de fuego y humo.
Después de la explosión sobre Hiroshima, los norteamericanos esperaban la rendición inmediata de Japón. Pero esto no sucedió. Los japoneses no sabían que se trataba de una bomba atómica. Fue un científico japonés que el 8 de agosto lo averiguo. 
El gobiernos japonés dio por hecho que los Estados Unidos sólo tenían una bomba atómica y, por tanto, pensaron que debían resistir y mantenerse armados, pero esta respuesta fue prevista por los estadounidenses y, como muestra de que tenían más bombas y de mayor fuerza destructiva, lanzaron la segunda bomba. 

Holocausto

El Holocausto fue la persecución y el asesinato sistemático, burocráticamente organizado y auspiciado por el Estado de seis millones de judíos por parte del régimen nazi y sus colaboradores. "Holocausto" es una palabra de origen griego que significa "sacrificio por fuego". Los nazis, que llegaron al poder en Alemania en enero de 1933, creían que los alemanes eran una "raza superior" y que los judíos, considerados "inferiores", eran una amenaza extranjera para la llamada comunidad racial alemana.
Durante la era del Holocausto, las autoridades alemanas persiguieron a otros grupos debido a su percibida "inferioridad racial": los romaníes (gitanos), los discapacitados y algunos pueblos eslavos (polacos y rusos, entre otros). Otros grupos fueron perseguidos por motivos políticos, ideológicos y de comportamiento, entre ellos los comunistas, los socialistas, los testigos de Jehová y los homosexuales.
En 1933, la población judía de Europa ascendía a más de nueve millones, y la mayoría de los judíos europeos vivía en países que la Alemania nazi ocuparía o dominaría durante la Segunda Guerra Mundial. Para el año 1945, los alemanes y sus colaboradores habían asesinado aproximadamente a dos de cada tres judíos europeos como parte de la "Solución final", la política nazi para asesinar a los judíos de Europa. Si bien las principales víctimas del racismo nazi fueron los judíos, a quienes consideraban el mayor peligro para Alemania, entre las otras víctimas se incluyen 200 mil romaníes (gitanos). Como mínimo, 200 mil pacientes discapacitados física o mentalmente, en su mayoría alemanes y que vivían en instituciones, fueron asesinados en el marco del llamado Programa de Eutanasia.

Consecuencias



  • Desastre de las potencias del Eje
  • Exaltación del sentimiento nacionalista
  • Alto costo de vidas humanas
  • Pérdidas materiales
  • Avance de la democracia
  • Avance tecnológico
  • Organización de las Naciones Unidas

Tratados

-Ultimátum de Francia (1939)
-Declaración de guerra (1939)
-Pacto de acero (1939)
-Pacto Antikomitern (1935)
-Pacto germano-soviético de no agresión (1939)
-Declaración de los derechos humanos (ONU).

Aliados

Los Aliados fueron los países opuestos oficialmente a las Potencias del Eje durante la Segunda Guerra Mundial.
Al comenzar la Guerra, el 30 de septiembre de 1939, la coalición enfrentada a Alemania consistía en Francia, Polonia y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, al cual se unieron poco después, algunos países del Commonwealth (Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Terranova y la Unión Sudafricana), el Raj británico y el Reino de Nepal. En 1940, se unieron la Francia Libre, Dinamarca, Noruega, Bélgica, Luxemburgo, los Países Bajos, Reino de Grecia y Reino de Yugoslavia (1941). En junio de 1941, la llamada Operación Barbarroja propició que la URSS se uniera a los Aliados. Los Estados Unidos de América se unieron en diciembre de 1941, tras el ataque japonés a Pearl Harbor, seguidos por China y algunos países de América del Sur. A partir de 1942, los llamados Cuatro Grandes, es decir, el Reino Unido, la Unión Soviética, los Estados Unidos y la China, dominaban la política aliada.

Potencias del Eje

Las Potencias del Eje, durante la Segunda Guerra Mundial, eran el bando beligerante que luchaba contra los Aliados, estando integrado y liderado por Alemania, el Imperio de Japón y el Reino de Italia, además de la ayuda de otros países.
Dichas naciones formaron un Pacto Tripartito que posteriormente derivó en lo que se llamó el Bloque Berlín-Roma-Tokio. Este nuevo bloque logró su establecimiento debido a las coincidencias que existían entre sus sistemas de gobierno, económico e ideológico de los tres países. De igual forma, compartían tres coincidencias de connotación negativa: fueron los países menos beneficiados por el Tratado de Versalles.